Antonio Álvarez deja en claro su pensar respecto a la administración de Barcelona (ENTREVISTA)
¿Los 50 palos de deuda y las formativas? "El presidente debe saber de fútbol. No le puede delegar a otra persona que supuestamente es Mandrake para que él decida qué jugadores o qué DT deben llegar"
Antonio Álvarez, vicepresidente deportivo de Barcelona en reemplazo de su hermano Aquiles, habló este día martes con radio Huancavilca de la ciudad de Guayaquil, para explicar su posición administrativa y de paso atizar a Rafael Verduga.
Claramente a favor de que el modelo de gestión que ha imperado en Barcelona desde hace más de cincuenta años, Antonio Álvarez defendió las injerencias presidenciales en cuanto a la estructura económica y lo deportivo en el club.
Menospreciaron las recomendaciones financieras pese a los cincuenta millones de deuda. "El presupuesto chimichurri, es un presupuesto de cinco millones de dólares al año que nos querían imponer. Es ahí donde se peleó por parte del presidente de Barcelona y del vicepresidente deportivo de esa época, para decirle que si quería irse a la serie B y jugar con los chavales como lo hizo Benito Floro, ese era el presupuesto. Mientras yo esté en Barcelona, eso no se iba a permitir, y así elevamos el presupuesto para el primer equipo".
Puso como ejemplo el fichaje de su arquero y capitán. "Cuando se logró traer a Burrai, nosotros dijimos que él era el indicado para jugar en Barcelona. Acá va a terminar de jerarquizarse, lo necesitamos. Ahí conocimos el valor del pago por rescisión de contrato. Se hizo la comparativa con la otra opción para el arco, y por él se iba a pagar el 10% de lo que costaba Javier, y el ahora candidato prefirió irse por ese lado. Nos opusimos porque creíamos en lo que podía darnos Burrai y ahí, él mismo decide pagar su rescisión. Estoy seguro de que sin él, no hubiésemos sido campeones en Casa Blanca. Me preocupa que con esa forma de pensar, Barcelona corra el riesgo de irse a la serie B".
Finalmente, evidenció también su posición respecto a una secretaría deportiva. "El presidente de Barcelona debe saber de fútbol. No le puede delegar a otra persona que supuestamente es Mandrake para que él decida qué jugadores o qué técnico deben llegar al equipo y cuál es el presupuesto que debe existir para el primer plantel. Los dirigentes le dijeron al entonces vicepresidente financiero y hoy candidato, 'hermano nos vamos a la guerra pero aquí se necesitan diez millones y medio de dólares para que Barcelona compita".